Cada vez que Google lleva a cabo una actualización importante es habitual que los propietarios de los sitios tengan miedo de que los cambios puedan afectarles. Esto es normal, ya que se pueden cambiar ciertos criterios que son capaces de variar el tráfico que recibe una página web haciendo que este descienda de forma drástica.
Si el posicionamiento SEO es algo que te preocupa, uno de los aspectos más importantes que debes tener en cuenta es la experiencia de usuario. Trata de ponerte al otro lado de la pantalla y piensa cómo te sentirías si visitas tu sitio web, ¿carga rápido? ¿Has encontrado contenido de calidad? Preguntas como estas también se las hace Google para tratar de valorar mejor tu sitio en internet y, en base a esto, en este artículo te vamos a enseñar a optimizar el Largest Contentful Paint para que tu sitio web cuente con un mejor posicionamiento y se mejore la experiencia de usuario.
El Largest Contentful Paint es una métrica que utiliza Google con la que evalúa cómo de rápido cargan cada una de tus páginas en tu sitio web. Esta métrica registra el momento en el que se carga el contenido principal, ya que este es el más importante de cada una de las páginas. El Largest Contentful Paint forma parte de los Core Web Vitals, por lo que es algo que debes cuidar y lograr que esté a la altura.
Son varias las causas que pueden provocar que el Largest Contentful Paint sea más alto de lo normal. Estas causas tienen que ver con los servidores lentos o mal configurados donde se aloja el sitio web, recursos pesados, por ejemplo, imágenes sin optimizar o CSS y/o JavaScript asíncronos. Aquí no nos vamos a centrar en los problemas que pueden hacer que tu Largest Contentful Paint sea más alto, sino que vamos a ver cómo puedes optimizarlo.
Optimiza el servidor donde se aloja tu sitio web
El primer paso que debes dar para que tus páginas carguen mucho más rápido es evaluar y reducir el tiempo de respuesta que tiene tu servidor. Esto te servirá para tener un sitio web mucho más rápido y, por lo tanto, mejorar las evaluaciones de las métricas de Google.
El tiempo de respuesta que tiene tu servidor web es el tiempo que tarda este en responder a la solicitud de visitas por parte de los usuarios. Esto incluye el HTML, CSS, JavaScript o cualquier otro tipo de archivo que tenga la página que el usuario se encuentra visitando. Uno de los problemas que tienen muchos sitios es que se encuentran en un servidor compartido. En este caso la solución es fácil, pasar a un servidor dedicado para no compartir los recursos con nadie.
Otro aspecto que debes tener en cuenta en el servidor es el almacenamiento en caché y el uso de sistemas CDN. Estos dos aspectos pueden reducir de forma considerable el tiempo que tarda tu servidor en cargar el contenido, por lo que también deberás cuidarlos y procurar que se encuentren optimizados, adaptados a lo que realmente tu sitio web necesita.
Optimiza las imágenes
Cuando un sitio web cuenta con grandes recursos es normal que el tiempo de carga sea elevado. Esto se debe a que algunos elementos como las imágenes, cuentan con gran tamaño y ralentizan el proceso de carga. En este caso la solución es de lo más sencilla, te recomendamos que comprimas las imágenes, utilices el tamaño adecuado de las mismas y también elijas bien el formato.
Los archivos de imágenes más utilizados son los archivos JPG y PNG. Es importante que elijas bien el formato adecuado dependiendo de lo que necesites. Si vas a subir fotografías, te recomendamos que las subas en JPG y, si lo que necesitas son imágenes para fondos transparentes, elige PNG.
Comprimir las imágenes para que estas ocupen menos espacio también está recomendado. Lo bueno de las imágenes en JPG es que, a pesar de que las comprimas, no vas a notar ninguna diferencia. Al contar con un tamaño más adecuado se reduce considerablemente el número de datos que el servidor debe cargar, por lo que la carga es mucho más rápida.
Finalmente, es importante que las imágenes se carguen con el tamaño adecuado. Revisa las imágenes de tu sitio web para comprobar que realmente estás cargando imágenes con el mismo tamaño que tienes configurado. Uno de los problemas más habituales que sufren muchos usuarios es mostrar una imagen de 200×200 píxeles cuando la imagen original que se ha subido es de 1200×1200.
Este problema es mucho más grave cuantas más imágenes tienes en tu sitio web. Si notas que tu sitio web va lento y tienes muchas imágenes, te recomendamos que revises una a una todas ellas para que las puedas optimizar y comprimir, notarás el efecto de inmediato.
CSS y JavaScript
Siempre que se busque un funcionamiento correcto de un servidor CSS y JavaScript son fundamentales. Un mal aspecto de cualquiera de ambos o un mal funcionamiento pueden provocar rápidamente la pérdida de muchos usuarios, algo que no desea ningún propietario de un sitio web.
Para que tu sitio web funcione de la forma adecuada y Google lo perciba como tal, debes asegurarte de que tanto el CSS como el JavaScript principal de tu sitio web cargue a la vez que el HTML. Esta carga a la vez servirá para que estos no se vean renderizados a medias. Una vez que la página haya cargado ya podrás configurar el resto de CSS y JavaScript de forma asíncrona sin problema.
Con esta carga a la vez se consigue eliminar CSS y JavaScript como un bloqueo del renderizado y, por lo tanto, se consigue agilizar la capacidad del navegador para descargar y mostrar los archivos que sean necesarios para mostrar el contenido principal de la página de la forma más rápida posible. Este aspecto guarda relación con el anterior, recuerda el optimizado de las imágenes para que estas puedan cargar más rápido.
Consideraciones finales
Cuando Google lleva a cabo un cambio es habitual temer que este pueda provocar una pérdida de tráfico, sin embargo, a veces el enemigo lo tenemos en casa. Es fundamental evaluar el servidor, optimizar las imágenes y cuidar CSS y JavaScript para mejorar las puntuaciones de LCP. Con todo esto lograrás mejorar tu posicionamiento SEO y la experiencia de usuario.
Contar con un buen posicionamiento SEO no es fruto de hacer las cosas bien en un determinado momento, sino de hacerlas bien todo el tiempo. Por mucho que hayas optimizado tu sitio web, si este sigue creciendo con nuevos contenidos, es muy importante que tengas en cuenta estos mismos aspectos con el nuevo contenido de tu sitio.
Esto te obliga a andar revisando el estado del servidor cada poco tiempo para cerciorarte de que todo se encuentra como debería estar. Solucionar estos problemas es mucho más fácil que tener que cambiar otros aspectos que se hayan visto afectados por la actualización de Google en cuestión. Tendrás que saber con exactitud cómo de rápido es tu sitio web antes de culpar a Google por los cambios. Valora siempre estos aspectos y evalúa con el tiempo tu servidor y tu posicionamiento SEO será siempre mejor.
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